Empezaré a reseñar televisión. Al contrario de lo que muchos dicen, yo sí la veo. No soy el único que considera algunos productos de la televisión como arte.
Me entero hoy de la entrada de Netflix en México debido a su alianza con Televisa para distribuir los contenidos de esta empresa televisiva en Latinoamérica, Brasil y el Caribe. Netflix es una de las empresas estadounidenses que transmite y distribuye películas y series de televisón por medio de streaming o DVDs.
No me queda en claro el modelo de negocio que tendrá Netflix en México porque advierto ciertas dificultades para emular la fórmula que emplea en Estados Unidos. Visualizo que el componente más importante de su negocio será ofrecer exclusivamente el servicio de streaming: la infraestructura de SEPOMEX no podría manejar el envío de piezas postales a lo largo de la república mexicana en periodos de días con el que suele manejarse Netflix (aunque el servicio postal en Estados Unidos deja mucho que desear).
Pero ahora bien, ¿cuál será el menú de opciones que ofrecería Netflix en México? Aunque me gustaría ver las películas de estreno que ofrece en su cartera norteamericana, supongo que las opciones de video estarían ligadas íntimamente con la restricción obsoleta de zonas geográficas, impuesta por la industria del DVD. Supongo que las películas y series serían aquellas que pertenecen a los contenidos de Televisa (aunque moriría por ver en Netflix los estimulantes trabajos que actualmente se realizan en el canal Once TV). En el caso excepcional de que se ofrecieran las series norteamericanas que aparecen por canal 5, éstas seguramente contarían con doblaje. Eso es lo que me gustaría ver. En el servicio de Netflix en Estados Unidos nunca vi opciones de otros idiomas (ya fuera audio o subtítulos) y eso es que me lleva a la inferencia que he realizado líneas arriba. Con seguridad, los contenidos carecerán de subtitulado, perpetuando ese defecto de la televisión mexicana y que deja de lado a consumidores con problemas auditivos en nuestro país.
Queda esperar la penetración que tendrá Netflix en México. Algunos especialistas arguyen que esta empresa tendrá un mercado de consumidores ante todo en la capa media alta ya que si ofrece el servicio exclusivo de streaming, apenas un porcentaje ínfimo de la población mexicana cuenta con acceso a servicios de Internet de alta velocidad.
En estos días Netflix se ha visto en medio de un escándalo con su base de usuarios debido a que desea imponer su servicio de streaming sobre el de DVD al grado de incrementar sus planes básicos de 10 a 16 dólares, un incremento de 60%. Muchos clientes no se encuentran satisfechos con la medida. A finales del año pasado esta empresa también anunció un aumento en sus planes básicos. A mí me tocó sufrirlo. Es por ello que desactive mi cuenta de Netflix en enero.
Dejo esta entrada como un ejercicio de fan fiction sobre el servicio de Netflix. Ojalá esta empresa ofrezca gratas novedades cuando inicie operaciones en México a finales de este año. Queda esperar.
Me entero hoy de la entrada de Netflix en México debido a su alianza con Televisa para distribuir los contenidos de esta empresa televisiva en Latinoamérica, Brasil y el Caribe. Netflix es una de las empresas estadounidenses que transmite y distribuye películas y series de televisón por medio de streaming o DVDs.
No me queda en claro el modelo de negocio que tendrá Netflix en México porque advierto ciertas dificultades para emular la fórmula que emplea en Estados Unidos. Visualizo que el componente más importante de su negocio será ofrecer exclusivamente el servicio de streaming: la infraestructura de SEPOMEX no podría manejar el envío de piezas postales a lo largo de la república mexicana en periodos de días con el que suele manejarse Netflix (aunque el servicio postal en Estados Unidos deja mucho que desear).
Pero ahora bien, ¿cuál será el menú de opciones que ofrecería Netflix en México? Aunque me gustaría ver las películas de estreno que ofrece en su cartera norteamericana, supongo que las opciones de video estarían ligadas íntimamente con la restricción obsoleta de zonas geográficas, impuesta por la industria del DVD. Supongo que las películas y series serían aquellas que pertenecen a los contenidos de Televisa (aunque moriría por ver en Netflix los estimulantes trabajos que actualmente se realizan en el canal Once TV). En el caso excepcional de que se ofrecieran las series norteamericanas que aparecen por canal 5, éstas seguramente contarían con doblaje. Eso es lo que me gustaría ver. En el servicio de Netflix en Estados Unidos nunca vi opciones de otros idiomas (ya fuera audio o subtítulos) y eso es que me lleva a la inferencia que he realizado líneas arriba. Con seguridad, los contenidos carecerán de subtitulado, perpetuando ese defecto de la televisión mexicana y que deja de lado a consumidores con problemas auditivos en nuestro país.
Queda esperar la penetración que tendrá Netflix en México. Algunos especialistas arguyen que esta empresa tendrá un mercado de consumidores ante todo en la capa media alta ya que si ofrece el servicio exclusivo de streaming, apenas un porcentaje ínfimo de la población mexicana cuenta con acceso a servicios de Internet de alta velocidad.
En estos días Netflix se ha visto en medio de un escándalo con su base de usuarios debido a que desea imponer su servicio de streaming sobre el de DVD al grado de incrementar sus planes básicos de 10 a 16 dólares, un incremento de 60%. Muchos clientes no se encuentran satisfechos con la medida. A finales del año pasado esta empresa también anunció un aumento en sus planes básicos. A mí me tocó sufrirlo. Es por ello que desactive mi cuenta de Netflix en enero.
Dejo esta entrada como un ejercicio de fan fiction sobre el servicio de Netflix. Ojalá esta empresa ofrezca gratas novedades cuando inicie operaciones en México a finales de este año. Queda esperar.